FAQ - Preguntas más frecuentes
¿Cómo se fabrican los imanes de neodimio?
Fabricar superimanes de neodimio-hierro-boro (NdFeB) requiere mucho esfuerzo.
La fabricación se lleva a cabo en China, donde también se extraen las materias primas necesarias.
A continuación, le mostramos los pasos necesarios para fabricar imanes.
Índice
¿Qué es el neodimio?
El neodimio es un elemento químico perteneciente a los lantánidos, más conocidos como «metales de tierras raras». Es de color blanco plateado brillante y se oxida adquiriendo un color violeta rosado cuando se expone al aire. Los imanes de neodimio están formados por una aleación de neodimio, hierro y boro y otras sustancias. La fórmula química de esta aleación es NdFeB.Por cierto: La aleación NdFeB se descubrió en 1984 y abrió posibilidades completamente nuevas en la fabricación de imanes. Gracias a la investigación, a las nuevas fórmulas y a los métodos de fabricación, los imanes de neodimio se han vuelto desde entonces un poco más fuertes. Así surgieron los imanes permanentes más potentes del mundo hasta la fecha.
Extracción y tratamiento
El mayor yacimiento de neodimio se encuentra en China, de donde se extrae. En la producción de imanes de neodimio, primero este se extrae del mineral en un proceso complejo. A continuación, se añaden hierro, boro y otras sustancias, y se funden para formar una aleación. La proporción de mezcla puede influir en la resistencia a la corrosión o en la temperatura de funcionamiento del producto final.
Fabricación y sinterización de piezas en bruto
La aleación se magnetiza ligeramente y, a continuación, se funde en una forma básica (normalmente cilíndrica o cúbica) y se enfría. Los lingotes resultantes se «resquebrajan» en un proceso especial mediante el cual se muelen hasta convertirlos en un polvo de unos pocos micrómetros de grosor. Para evitar que el polvo se oxide, se lleva a cabo en un entorno cerrado. A continuación, el polvo se expone a un campo magnético y se le da forma bajo presión. En esta fase de fabricación, se determina el sentido de magnetización de los imanes. La sinterización posterior, en la que se aplican una elevada temperatura y presión, comprime el material y reduce el volumen del imán. En ese momento, el imán resultante se asemeja a su forma final, pero su superficie sigue siendo irregular. Su estructura cristalina única es ideal para la magnetización posterior.
Nivelación de la superficie
En este paso se crean los imanes en bruto terminados. La superficie rugosa de los imanes en bruto se corrige puliéndola y recortándola. Debido a su dureza, el neodimio se debe procesar con herramientas de diamante. Para reducir el riesgo de incendio, las herramientas se enfrían con agua.
Revestimientos de imanes en bruto
El neodimio-hierro-boro se oxida al verse expuesto al aire y es extremadamente frágil. Para que los imanes sean más resistentes, llevan un revestimiento. El más habitual, el de níquel-cobre-níquel (Ni-Cu-Ni), es muy fino, ya que así se pierde la menor fuerza de sujeción magnética posible. En nuestras FAQ «¿Con qué se revisten los imanes?», puede consultar qué revestimientos alternativos existen.
Magnetización y control de calidad
En la última fase de fabricación, los imanes terminados se colocan en una bobina magnética por la que fluye una potente corriente durante un milisegundo. Esta bobina genera un fuerte campo magnético. Los imanes Supermagnete se magnetizan a través de este campo magnético, lo que significa que la estructura cristalina se alinea con el campo magnético de la bobina. Cuando la bobina se vuelve a apagar, los imanes quedan permanentemente magnetizados y pasan por un último control de calidad, en el que se comprueban el tamaño, el revestimiento y la magnetización.